¿Estás planeando una mudanza de larga distancia? Desde la creación de la lista de inventario hasta la organización del transporte y el embalaje de la casa, es probable que haya muchas cosas en juego. Y puede resultar aún más abrumador si tienes un perro, un gato u otra mascota que formará parte de la mudanza.
A continuación, repasaremos nuestros principales consejos a tener en cuenta para una mudanza de larga distancia con tus mascotas:
Hazles un chequeo
En primer lugar, agenda una cita con el veterinario tan pronto como puedas. Revisa que no le falten vacunas o pruebas recomendadas, es posible que necesites algunas citas en el veterinario antes de la mudanza, así que planifícalas con bastante antelación.
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Tu veterinario determinará lo que tu mascota pueda necesitar y se asegurará de que tengas los suministros suficientes de cualquier medicamento, como los tratamientos contra las pulgas y las garrapatas. Prepara y abastecete de todo lo que puedas ahora, para que no tengas que ir corriendo a buscar un nuevo veterinario cuando llegues a tu nuevo barrio.
Investiga bien
Tanto si viajas en avión como en carro, asegúrate de investigar bien. Las compañías aéreas, por ejemplo, tienen diferentes normas sobre cuándo puede estar tu mascota en la cabina contigo, cuándo debe ir en la bodega de carga y qué tipo de transportín necesitan. Antes de reservar un vuelo para ti y tu familia, investiga las normas de la aerolínea y ponte en contacto con ella para obtener más información.
Piensa en tus suministros
Una vez que hayas reservado tus planes de transporte, empieza a hacer una lista de los suministros que tu mascota necesitará. Algunos ejemplos son:
- Agua y platos para el viaje
- Comida y golosinas especiales
- Bolsas para sus necesidades
- Botiquín de primeros auxilios para mascotas
- Medicamentos y copias del historial veterinario
- Artículos de limpieza y trapos (en caso de accidente)
Adaptarlos al guacal (En caso de ser necesario)
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Compra el guacal con bastante antelación a la fecha de la mudanza, para que tu mascota tenga tiempo suficiente de acostumbrarse a ella. Lo mejor son unas semanas o más.
Si tu mascota no ha estado nunca en un guacal, es posible que se muestre escéptica al principio, lo cual es totalmente normal. Coloca el guacal en una zona común en la que le guste pasar el tiempo y añade su manta, juguete o golosina favorita dentro del guacal. Deja que olfatee y explore a su ritmo.
También puedes intentar alimentar a tu mascota dentro del guacal. En el caso de los perros, asegúrate de elogiarlos cada vez que entren.
En ruta
Ha llegado el día de la mudanza a larga distancia. A estas alturas, deberías estar preparado y listo para viajar con tu mascota. En el caso de los perros, considera la posibilidad de empezar el día haciendo algo de ejercicio, ya sea dejándolos correr un poco por el patio para que saquen algo de energía y estén cansados.
Si viajas en avión, intente llegar al aeropuerto dos horas antes de tu vuelo, para disponer del tiempo extra necesario para la gestión de la mascota.
En los viajes de larga distancia, no olvides planificar descansos para hacer tus necesidades y jugar cada tres o cuatro horas con tu mascota.
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