Guardar electrodomésticos en una bodega de almacenamiento es una solución práctica para liberar espacio en casa o durante una mudanza. Sin embargo, para asegurar que estos aparatos se mantengan en óptimas condiciones, es crucial tomar precauciones específicas. Un almacenamiento inadecuado puede resultar en daños costosos o incluso la inutilización de tus bienes más preciados.
Preparación es clave: limpieza y secado
Antes de trasladar cualquier electrodoméstico a una bodega de almacenamiento, la limpieza es fundamental. Asegúrate de que todos los aparatos estén completamente secos para evitar la proliferación de moho y hongos, especialmente en refrigeradores, lavadoras y lavavajillas.
Desconecta todos los cables y, si es posible, retira bandejas y compartimentos internos para una limpieza más profunda. Un electrodoméstico limpio y seco tendrá una vida útil mucho más larga en una bodega.
Embalaje adecuado para máxima protección
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El embalaje juega un papel vital en la protección de tus electrodomésticos. Utiliza plástico stretch, espuma o mantas protectoras para envolver los aparatos, prestando especial atención a las esquinas y superficies delicadas.
Las cajas de cartón resistentes son ideales para artículos más pequeños como microondas o licuadoras. Para televisores y monitores, las cajas originales con sus protectores de poliestireno son las mejores. Asegura los cables y accesorios dentro de la misma caja o en bolsas etiquetadas para evitar pérdidas.
Selección de la bodega y posicionamiento
Al elegir entre las diferentes bodegas de almacenamiento, busca instalaciones que ofrezcan control de seguridad 24/7 y busca una sede cercana a ti. Una vez en la bodega, coloca los electrodomésticos sobre paletas o plataformas para elevarlos del suelo y protegerlos de posibles humedades.
Evita apilar objetos pesados directamente sobre ellos, y si es necesario, deja pequeñas aberturas en puertas de refrigeradores o lavadoras para permitir la ventilación y prevenir malos olores.
Siguiendo estos consejos, tus electrodomésticos estarán seguros y listos para usar cuando los necesites, sin importar cuánto tiempo permanezcan en las bodegas de almacenamiento.
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